¿Cómo es realmente un Data Center? ¿cómo se ve? ¿cómo se escucha? Eso nos preguntábamos justo antes de descubrirlo por nosotras mismas.
Y allí estábamos… mi compañera Andrea y yo nunca habíamos conocido un Data center, teníamos una cantidad de imágenes y videos que nos ilustraban un poco, pero el mundo no se ve igual detrás de una pantalla.
Bien, recapitulemos.
Hosting, Servidores, Housing, Soluciones empresariales no vinieron a ser parte de mi léxico hasta hace unos meses. Yo era como usted lector, un poco apartada de la tecnología, pero nunca se está lo suficientemente lejos en este siglo XXI. Aunque si usted es un conocedor, lo invito a que se sienta un Dummy de nuevo, quizá con acné en la cara (quien sabe) un par de lentes menos modernos, tal vez, y el carnet de “visitante”, todo esto un paso antes de estar dentro del espacio en que se mueve ese activo más importante por el que matarían los empresarios, la información.
En un principio, llegamos a creer que no iba a ser posible que ingresaramos con los equipos de video que poseíamos. Recuerdo que nuestro guía Javier en ese momento dijo: “Vamos a la sala 1”. De inmediato ambas supusimos lo mismo, no era posible el ingreso con los equipos de video y por alguna razón íbamos a una sala de conferencias.
Seguimos al guía cual niño que sale por primera vez de su casa, sin tocar nada y sin hacer ruido. Hasta que nos detuvimos en un pasillo, Javier pasó su tarjeta por uno de esos aparatos que habilitan el ingreso, y de paso registran pulso cardiaco, respiración, retina y los años que le quedan de vida..
Luego “Ábrete sésamo” estábamos en el Data Center.
La fila de Racks se extendía hasta el otro extremo de la habitación, aquel ruido nos fue familiar gracias a los videos que antes habíamos visto, sin embargo escucharlo desde allí era bastante curioso. Lo siguiente fue desempacar todo el equipo, nuestra misión realmente era recolectar material fílmico.
Había trabajo por hacer. Todos los Racks estaban organizados por filas, después un nuevo pasillo, filas de nuevo, y otro pasillo. Mi ubicación espacial nunca ha sido la mejor así que seguramente habré pasado por los mismos lugares. Creo que arruine las tomas de video de Andrea unas cuantas veces, ella grababa y yo salía por una esquina, ella movía la cámara y yo aprecia detrás de un Rack.
Andrea y yo nos separamos y empezamos a recorrer el lugar. Todo se veía como el paraíso de un obsesivo compulsivo, cada cable puesto en un lugar preciso, quiero decir, los muchos cables de cada Rack organizados tan cuidadosamente que uno podía percibir hasta las horas de trabajo dedicadas allí. Sin embargo, este mundo es más que servidores y cables conectados. En ese instante me limite a lo que veía, pero ese es solo un aspecto en la extensa estructura de este negocio.
Mientras tomaba algunas fotos pude ver a un ingeniero en su hábitat natural, estaba arrodillado haciendo no sé qué cosas, con unas de esas herramientas de ingenieros. (Bueno, a nadie se le quita lo Dummy tan fácil).
Minutos después me encontré con Andrea, mi compañera, y ahora el Rack estaba solo, el ingeniero debió haber salido unos instantes, así que nos dirigimos allí y la situación me motivó la curiosidad y me atreví a introducir mi mano en aquella “nevera ruidosa”. Creo que Andrea me dijo que no lo hiciera, casi no la escuche, estaba preguntándome si estaría muy caliente en el interior del Rack, pero en realidad no, la mano no se me pulverizo y por suerte el ingeniero no llegó para ver a dos niñas jugando allí.
Enseguida fue tiempo de irnos, Javier le dijo a Andrea que tenía una reunión, así que volvimos a empacar todos los equipos, esperando no habernos olvidado de nada. Yo miré a Andrea, también tenía esa misma sonrisa que yo. Habíamos cumplido nuestra misión y ya sabíamos qué y cómo era un Data Center, ella dijo algo como… “Muy chévere”.
Salimos y acto seguido le agradecimos a Javier por ayudarnos con esta visita, le deseamos una buena vida y luego nos encaminamos a la salida.
De regreso no hablamos de otra cosa, era un intercambio de las cosas que ambas habíamos visto, luego le contamos a nuestro compañero nuestra experiencia, después a nuestro jefe, y de seguro cada una por su parte le siguió contando a alguien más. ¿Y cómo no hacerlo? siempre vemos la vida detrás de un escritorio, y esta vez fue la grata experiencia de conocer de primera mano de que se trata este negocio de los Data Center y estar allí presenciando como se sigue impulsando este siglo XXI. Lo gracioso de esto es que nos dijeron que apenas y habíamos estado en una sala pequeña, así que recién inicia este camino de pasos tímidos y experiencias nuevas.
Ver también: Nuevo Data Center de HostDime Brasil en João Pessoa Tier III, Los Data Centers y sus inconvenientes en verano, Data centers, Espacio, densidad y refrigeración
Cuando no es Diseñadora de animación digital, Productora multimedia y Gerente Redes sociales de HostDime Perú, trabaja en sus propios proyectos de escritura, producción y edición de videos.
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