La conectividad es parte de los derechos humanos, o al menos debería serlo

La conectividad es parte de los derechos humanos, o al menos debería serlo. No se trata tan solo de tener acceso a internet, a Google o a Facebook; se trata deponer contar al menos con un dispositivo electrónico digno, un móvil por ejemplo que nos permita explorar otras posibilidades de conocimiento, de formas de vida, de cultura, etc.

Visto de manera básica, la conectividad implica la posibilidad de al menos ser capaces de recibir una llamada, un mensaje de texto y así mismo de enviarlo.
Esto tiene un potencial gigantesco, máxime si una llamada a tiempo puede prevenir a una población vulnerable de una epidemia, de medidas profilácticas a tomar, de un peligro inminente.

Disponer de la información, donde y cuando la necesitemos, no es un lujo, es una necesidad sentida por todas las culturas alrededor del orbe. De alguna forma el conocimiento, el acceso al saber nospermitirá resolver los problemas del mundo, socializar las soluciones que vamos hallando a nuestros inconvenientes, enriquecer estas experiencias con las vivencias de otras personas en situaciones semejantes.

Dirán los estrictamente puristas que cómo podemos hablar de este ítem como un derecho fundamental, cuando permanentemente se violan flagrantemente los derechos a la vida, a la dignidad, a una vivienda decente, a un bocado de comida, a erradicar la pobreza del mundo , a un sorbo de agua potable etc. etc. Que posiblemente sea más un lujo, un bien ostentoso. Recordemos que los derechos humanos son inherentes a todos, más allá de raza, etnia, lenguaje.

Internet tal vez, per se, no sea la panacea, la solución a todos nuestros problemas; sin embargo cierra brechas, iguala de alguna forma a los seres humanos, promueve la equidad y combate las enfermedades y muchas otras falencias. Es el verdadero poder popular, ese que nos permite expresarnos, manifestar nuestros pensamientos, divulgar las situaciones; es la capacidad de intervenir en tiempo real, influir e impactar en transacciones y eventos.

La conectividad, literal y metafóricamente nos permitirá remodelar, rediseñar el mundo. Cuanto me gustaría la conectividad de alta velocidad además para este mundo, para poner las cosas en el mismo nivel, para lograr que los países del tercer mundo equiparen sus oportunidades con los países industrializados, desde las oportunidades y el conocimiento.
Se requiere una fuere inversión en infraestructura, en tecnología de vanguardia que abarate costos, en innovación. Pero creo que el reto vale la pena.
¿Crees qué la conectividad es un derecho fundamental? ¿Qué opinas?

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