El Spam es uno de los problemas más comunes de manejo de contenidos hoy en día, sobre todo vía correo electrónico. Si bien es uno de los canales que mayores ventas reportan a las marcas que lo utilicen para comunicarse con sus clientes, también podría ser la vía directa al abandono, ser ignorado por siempre e incluso caer en una de las indeseables listas negras de Spam. Hoy revisaremos algunas de las razones por las cuales tus correos personales o corporativos están alimentando la bandeja de Spam de tus usuarios y por consecuencia, cayendo en alguna de las indeseables listas negras.

Existen varias razones por las cuales los correos electrónicos son identificados como Spam:

Direcciones de correo Spoofeadas: El spoofing se trata de una práctica que implica la suplantación de la identidad en la dirección de correo electrónico del remitente. Se realiza la suplantación de identidad usando un servidor SMTP que ha sido configurado específicamente para ello. Los filtros de Google se encargan de evaluar que efectivamente quien envía el correo es el usuario real, y si no, envía el correo a Spam.
Pishing: El pishing o intentos de pisghing también supondrían una suplantación de identidad, aunque la intención es lograr obtener algún dato de usuario, contraseña, números de cuenta o información personal. Se supone que es más fácil de detectar al ser muy evidentes, pero en algunos casos muy avanzados es difícil reconocer lo verdadero de lo falso. Por estas razones, las instituciones bancarias o que manejan datos sensibles colocan entre sus medidas de seguridad que el Banco jamás solicitará datos mediante correos electrónicos, e insta a los usuarios a nunca brindarlos, y menos vía email.
Los mensajes de usuarios no confirmados: Gmail clasifica como Spam cualquier correo electrónico que no se encuentre verificado, sea cual sea la razón: o porque el servidor SMTP no lo reconoce o simplemente no se introdujo un usuario y contraseña para autenticar su identidad. Algunas veces los servidores podrían dar problemas de autenticación y estos correos no implican riesgos, así que si nos han escrito y el correo no ha llegado a la bandeja de entrada, es importante revisar la carpeta de Spam.
Cuando marcamos como Spam: Luego de marcar algunos correos electrónicos del mismo remitente como Spam, Gmail automáticamente marcará los siguientes que recibamos. Si te has equivocado al marcar como Spam, basta con desmarcarlo y volverán a tu bandeja de entrada como lo hacían habitualmente.
Mensajes engañosos: Existen correos que desde su asunto podemos saber que son engañosos, éstos son marcados como Spam automáticamente. De hecho es posible que sean marcados como Spam algunos que se parezcan a los que ya están marcados como pishing o Spam.

¿Cómo administrar qué es y qué no es Spam para tu compañía? Si utilizan los servicios de correo electrónico de Google, podrán configurar directamente según qué factores se determina o no el Spam.

Existen varios filtros que emplea Gmail para determinar si los correos que enviamos son Spam o no; es importante revisar de vez en cuando la carpeta y depurarla o seleccionar aquel contenido que no sea Spam para nosotros. Incluso, si los correos que envías están siendo marcados como Spam sin razón aparente, podrías contactarte con el equipo de soporte de Gmail para salir de la lista de Spam para tus usuarios.

Quizás nuestra dirección IP se encuentra en la lista negra de correo no deseado, y sin importar el correo que sea remitido desde allí, será marcado como Spam. También podría ser que tu proveedor de servicio de internet te ha brindado esa dirección IP sin verificar anteriormente si era 100% segura. Las famosas listas negras son mecanismos utilizados por los ISP para identificar como Spam y bloquear direcciones IP o dominios.

¿Por qué estarías en la lista negra?

Aunque no seas un spammer, podrías estar en alguna lista negra si no trabajas en realizar prácticas correctas al mantener tus listas de contactos y comunicarte con ellos.

Algunas de las causas más comunes son:

Compraste tu lista de contactos: Comprar contactos no es la mejor estrategia para obtener buenos resultados de venta. Muchos usuarios podrían no estar verificados, tener correos inexistentes, etc.
No solicitaste confirmación: Si no le has pedido a tus contactos la verificación de sus correos electrónicos, puede que tu lista tenga direcciones incorrectas o simplemente inexistentes, y esto afecta negativamente tus resultados y reputación
Usos que no han sido autorizados: El usuario que se suscribió a tu lista de correos quiere que le llegue cierta información, y si la utilizas para otra cosa, tu credibilidad puede verse muy afectada.
Malas prácticas: Probablemente no estás respetando la confianza de tus suscriptores, incurriendo en alguna de las siguientes acciones: Seguir enviando correos a usuarios que no lo desean, enviar emails muy frecuentemente, el asunto tiene tendencia a parecer Spam, envías correos con contenido irrelevante, etc.
Daños por consecuencia: Tal vez tu servidor de correo electrónico no implemente los parámetros de seguridad correspondientes, y algún usuario malintencionado podría utilizar tu servidor de correo para enviar Spam a miles de usuarios, logrando que tu IP o dominio termine en una lista negra.

Cuidar los aspectos de forma de obtención de correos, tipos de correos y aspectos técnicos de tu envío de correos te ayudará a evitar tanto ser considerado como Spam como ingresar en alguna de las temidas listas negras; así que lo mejor que puedes hacer es recolectar tus contactos de forma legal y consensuada, brindar contenido de calidad a tus usuarios en cada email y asegurarte de contar con un servidor de correo electrónico que cumpla con todos los parámetros de seguridad, entre algunas de las otras recomendaciones claves que ya hemos mencionado.

Aprovecha este medio para hacer amigos, clientes potenciales, compradores y fidelizadores, no para malograr tu reputación o ser evadido y abandonado a la carpeta de Spam.

Ver también: LISTAS NEGRAS: Combatiendo el Spam

María Fernanda Toro

Licenciada en Letras, apasionada por la redacción creativa y el Marketing Digital. Convencida de que decirlo no basta, debe ser en el lugar indicado, con las palabras correctas y mucha creatividad.

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María Fernanda Toro

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